El lavabo del pub, ojos vendados y una teen esperando rabos. Lana, la vecinita zorrita y su adiccion al sexo
Lana: una jovencita responsable e inocente, alguien que parece no haber roto un plato en su vida. La típica compañera de factultad que se sienta en la fila de delante, y a la que más de una vez has pedido los apuntes. ¿Dirías que es capaz a la vez de ser una ninfómana salida incapaz de no follar durante más de dos horas seguidas? Pues aquí llega "Es tu vecina" para mostrártelo. Y es que la vida de Lana se mueve en torno a una sola cosa: SEXO. Para esta joven follar es su válvula de escape: su manera de desestresarse, es cepillarse a todo lo que se le ponga por delante, e incluso reconociéndonos que en cuanto sale de fiesta y ve a un tío, todo lo demás se le desdibuja, y su único empeño es llevárselo a la cama. Esta adicción al sexo le ha llevado a situaciones bastante incómodas con su ex y sus amigos, que la llevan a un circulo vicioso en el que "se estresa, folla más para desestresarse, y se estresa más todavía", , un círculo que quiere aprovechar dedicándose al porno. Ese es el motivo por el que ha llegado a nosotros, pero nosotros queremos comprobar si esa ninfomanía es cierta, por lo que le vamos a proponer una verdadera prueba de fuego: Vamos a meter a Lana en los baños de un bar con las bragas bajadas, el culo en pompa y los ojos vendados, completamente a merced de cualquier salido que pase al bar (y no serán pocos) dispuesto a follársela o manosearla. Pero Lana no solo no tiene ningún problema, sino que disfrutará la situación al máximo posible. No os distraemos más: ¡Contemplad a una tierna jovencita convertirse en una ninfómana en un abrir y cerrar de ojos!